Otro personaje misterioso (y pelirrojo como los polis irlandeses de New York) que se suma a este aquelarre. Y en esta ocasión no estamos hablando de un autor de cómics, un poeta o un novelista, sino de un músico con todas (o pocas, en realidad) las de la ley, con una experiencia en los circuitos subterráneos del blues desde hace casi dos décadas (aunque bien podría ser que fueran más, pues este hombre orquesta tiene una edad indeterminada que lo convierte en un candidato a formar parte del clan McLeod).
Pablo Correa Toledo, veterano de agrupaciones como Underdogs y Baobab Trío, trae al Sábado Negro su guitarra y su amplificador para deleitarnos con melodías oscuras en el acto de clausura de las 2 de la madrugada: un fin de fiesta que, podemos decirlo, nos merecemos todos.
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